Hacía rato que buscaba leer algo de Bruzzone, buscaba "Los Topos" o "76", había leído las reseñas de Quintin, de Sarlo y tenía muchas ganas de encontrarme con este autor. "Los Topos" es la primera novela de Félix Bruzzone, hijo de desaparecidos, quien en su primer trabajo encara su proceso de búsqueda desde una óptica completamente distinta de la que nos podemos esperar, o la que podríamos esperar.
En "Los topos" se cuenta la historia de un pibe, hijo de desaparecidos, criado una abuela que se dedica a la repostería que luego de pelearse con su novia supuestamente embarazada conoce y se enamora de la travesti Maira, también hijo de desaparecidos, cuyo leit motiv de vida es matar represores. El travesti tiene un historial de supuestos asesinatos de algunos policías paraguayos en la triple frontera. Maira se desliza como un infiltrado entre supuestos represores, como un topo entre quienes tiene marcados como futuras víctimas, pero ella también termina desaparecida. ¿victimas matando victimarios? ¿justicia por mano propia?
Con su enamorado travesti desaparecido el protagonista decide algunos cambios radicales en su vida. Se va a vivir al sur, cambia de identidad, se hace el mismo travesti y se enamora de un hombre cruel y perverso que lo convence que se ponga tetas para transformarse en un travesti hecho y derecho. La relación entre el protagonista y el Alemán, este personaje nefasto, es muy perturbadora rozando momentos de gran erotismo, ternura con violencia extrema.
Hacia al final de la novela, entre momentos melancólicos y poéticos, el sueño del protagonista es que ambos, el Alemán y la flamante travesti a medio camino entre esclava sexual y domestica, saldrían a buscar a Maira. Lo que nunca se detiene en esta novela es la búsqueda.
Una novela perturbadora, que oscila entre odio, complicidad, erotismo y asco. Una novela que encara un tema desde una perpectiva completamente distinta.Una historia rara, buena, que se lee de forma vertiginosa.