Hoy leí en ¨La Nación¨ la nota acerca de algunos de los blogs más leídos de la Argentina y después estuve investigando un poco esos blogs (uno de cuentos, otro que habla un poco de comunicación y publicidad, otro que asesora en viajes y uno de novedades tecnológicas) y la verdad es que algunos están buenos pero ninguno hace una gran diferencia, es más, creo que lo mejor que tienen los autores es como venden sus blogs, la verdad es que lo hacen de mil maravillas.
¿Hay alguien ahí? nació en julio del 2006 y desde ese entonces creo que nunca hice un balance, por eso creo que este puede llegar a ser un buen momento para hacer un pequeño balance con algunos datos fidedignos. Algo que estaría bien aclarar es que mis conocimientos de computación o Internet son solo a nivel usuario y es por eso que me considero en cierta forma un autodidacta en esto de los blogs.
Para los que piensan que la vida es estadística les cuento que a este blog tiene un promedio de entre 30 a 50 visitas por día, hubo picos de casi 150 visitas por día pero el promedio es mas o menos ese. Durante mucho tiempo pensé que cuanto más posteaba más visitas iba a tener, lo cual en cierta forma puede ser cierto, pero con el paso del tiempo preferí priorizar la calidad antes que la cantidad, creo que vale más un buen post de algún tema interesante que poner un post por día que sea mediocre. Creo que lo más difícil de todo es conseguir un estilo propio, eso marca la diferencia, tratar de poner un post de algo original puede ser lo que te distinga pero a veces también esta bueno solo escribir que te duele la cabeza. Durante un tiempo este blog tuvo numerosos comentarios pero desde hace un tiempo que estos brillan por su ausencia, generalmente la gente no hace comentarios porque cree que hay que hacer un comentario original, inteligente aunque la gran mayoría de mis comentarios en otros blogs son solo para saludar o para decir alguna redundancia.
¿Qué puedo decir de escribir en el blog?
Les puedo decir que escribir me hace sentir muy bien, me hace sentir vivo, a veces escribo cuando estoy triste y ese latigazo de angustia funciona como disparador o cuando estoy muy feliz (aunque cuando uno esta feliz escribe cosas bastante pedorras), escribo para espantar fantasmas que me dan mucho miedo o para tratar de descubrir quien soy, quien habita adentro mío aunque el turismo interior no es lo que más me gusta. Otras veces escribo porque estoy furioso y molesto por la forma en que esta planteado el mundo y no entiendo un montón de cosas y también me gusta mucho escribir para que los que lean sepan como era vivir y morir en África. Otras veces recuerdo que escribía porque tenía mucho pero mucho miedo de que me olvidaran.
Escribo porque como todos ustedes, trato de hacer cosas que me hagan feliz.