Pacto

V. L., 67 años.
Seropositivo desde hace años, actualmente en tratamiento antiretroviral y admitido en el hospital desde hace una semana por un cuadro respiratorio y malnutrición severa. Durante la semana se le diagnostico Tuberculosis y se comenzó el tratamiento especifico. La realidad es que el abuelo esta medio muerto y quizás no falte mucho para que se muera del todo, esta todo acurrucado en la cama, sin miedo, sin quejas, sin indignarse por no tener nada que comer en las ultimas semanas o en los últimos años, sin culpar al destino o a fuerzas oscuras. Durante los últimos días pasé varias veces por día por su cama y si bien uno puede considerarse un buen médico o al menos uno con algo de sentido común para saber cuando buscar ayuda o consultar a los libros, comprometerse con el paciente explicándole su enfermedad y el tratamiento pero lamentablemente si uno no firma a través de una mirada o un gesto ese pacto o alianza entre medico y paciente del que dependerá la curación, todo lo demás será en vano, antibióticos, jeringas o rayos X no cambiarán absolutamente nada. Con el viejo solo hay silencios, palabras aisladas, tal vez el piense que su hora llegó, quizás yo no lo tranquilice demasiado o hasta quizás haya otras fuerzas que luchan entre nosotros en esos penosos minutos que estamos juntos. En cualquier caso estoy seguro que el espera algo más y no estoy seguro de que.