Era muy temprano cuando acompañe a E. a la sala de partos, nos cambiamos, ella se acomodo en la camilla y yo me acomode a su lado. Emilio salio de las entrañas de E. a las 5,42 de la mañana del sábado 6 de noviembre. Guardo mis pensamientos ya que escribirlos en este blog sería una sarta de lugares comunes.
La imagen de E. y Emilio mirándose por primera vez, mis primeras palabras en el oído de mi hijo, la primera vez que lo tuve en mis brazos. Imagenes y expresiones grabadas en mi memoria para siempre
Su pequeña gran presencia no se compara con nada en este mundo