7.3.10

Semana 41 en Camboya


Lunes.
Desde hace un par de semanas estamos haciendo un screening masivo para detectar Tuberculosis y HIV entre los detenidos de los centros correccionales de Phnom Penh, la idea es es ofrecerles el screening a los mas de 3000 detenidos en las dos cárceles mas importantes de Camboya. El sistema penitenciario Camboyano cuenta con mas de 14 centros de detención y solo dos tienen centros de Salud reconocidos por el Ministerio de Salud, el resto se arregla según el presupuesto del preso y su familia y la buena predisposición de los guardiacarceles.

Martes.
Le confirme a mi jefe que no voy a extender mi misión por lo que recursos humanos empezara a buscarme un reemplazo. Hubo tristeza en su mirada pero no sorpresa, formo parte de un buen equipo y con el tiempo desarrollamos un conexión importante.

Miércoles.
Todo el día aturdido por los capítulos finales de "Six Feet Under", no exagero porque creo que la serie trasciende definitivamente el plano televisivo para convertirse en una atrapante novela con una densa trama psicológica. Voy a extrañar los magistrales comienzos de los capítulos a través de una muerte anónima, singular y arbitraria. Todas las muertes lo son. Six feet under es una historia sobre nuestra muerte, sobre lo que vendrá y algo que en determinado momento todos debemos enfrentar. Allan Ball, su creador nos cuenta la historia de una familia que regentea una funeraria, que se codea cotidianamente con la muerte porque ese es su negocio. Así como otros vemos pacientes o amasan pan los Fisher embalsaman, maquillan y velan personas que ya no son y mientras tanto a ellos les ocurren cosas emparentadas con la locura, el amor y la rutina. Todas estas pequeñas cosas, lejos de grandes epopeyas, se encuentran enmarcadas por perturbadores silencios y una atmósfera muy particular.Vuelvo a repetirles que quede aturdido por varios días, el final de la serie es un punto muy alto y será difícil de superar por las series de turno.

Nada mas que la muerte y su desesperante naturalidad.

Jueves.
45 fueron los pacientes recibidos en el pequeño centro de tratamiento del cólera que armamos en el Hospital de Thakmao durante esta semana.

Viernes.
Una pequeña controversia entre mi jefe y una de las autoridades del ministerio de salud hizo que terminemos el viernes en un clima atípico.