2.9.07

Observar el abismo

"...Nos echan a este mundo, y nadie nos ha preguntado si queríamos nacer, nadie nos previene de lo que nos espera, ingenuo pensamiento el que dice que la vida es un don, algo que deberíamos agradecer cada día que nos despertamos y cada día que pasamos y seguimos aquí... Yo pienso (y empiezo a pensar que pienso demasiado) que también puede ser una carga, una pesada carga, que día a día algunos de nosotros llevamos encima sin poder quitárnosla, pero deseando hacerlo. No estoy loco, nadie debe juzgar que mi lucidez significa locura, ¿o quizás sí?, y por eso los cuerdos están en el manicomio. Lo he intentado, claro que lo he intentado, pero la ¿gracia? del asunto es que he fracasado... Así que aquí sigo, sin saber muy bien qué hacer. Una de las cosas que tengo más claras, es que la sociedad tal como es ahora, no me gusta, vivo en ella porque no me queda otro remedio, y porque al mismo tiempo que la aborrezco, la necesito para subsistir. Pero no me gusta, quizás en lugar de ¿avanzar? tanto en el campo de la tecnología, de la ciencia, del consumismo,... Deberíamos pararnos en seco y mirar atrás, mirar lo que vamos dejando a nuestra espalda, recapacitar y meditar en si realmente estamos siguiendo el camino correcto, o por el contrario, estamos destruyéndolo todo a nuestro paso como Atilas de pacotilla. Mi pesimismo, como le llaman los demás, o lucidez, como le llamo yo, es una pesada carga que tampoco pedí llevar. Es difícil vivir así, y casi merezco una medalla por, a pesar de todo esto, seguir levantándome cada día, ir al trabajo y colaborar en algo que no deseo que siga así, sino aniquilarlo. La aniquilación es renovación, porque al final de ella, la vida (esa eterna inmortal) vuelve a resurgir... Si tuviese el poder, destruiría al hombre, limpiaría de la tierra su huella y la dejaría libre para que la naturaleza recupere lo que siempre ha sido suyo. Y quizá, en un futuro lejano, la evolución haría que un nuevo ser inteligente poblara este planeta. Porque no considero que el hombre sea un ser superior, ni inteligente, creo que es un ser peligroso por su gran (casi ilimitada) capacidad de contaminación. Y su carente capacidad de creación, allí donde toca, la caga. Dejando un montón de mierda a su paso..."

Émile Cioran (1911-1995)

N de la R: Por favor estimados lectores...no crean que mi bitácora se esta transformando en cierto reducto nihilista, este blog seguirá tendrá siempre un espíritu divertido, irónico y sobretodo optimista pero al ver esta foto no pude sino que pensar en cierto aforismo de Cioran, al que no pude recordar con exactitud pero era muy pesimista, si bien es cierto que el supuesto pesimismo de Cioran es algo mucho más complejo. Es ese tipo de sentimiento presente en aquellos que observan el abismo y tienen que seguir existiendo con el trágico conocimiento que han descubierto. Por ello no es fácilmente explicable a través de hechos simples. No leí muchas cosas de este escritor rumano, pero lo que más recuerdo con exactitud es un gran sentimiento contradictorio. Una contradicción que se fundamenta en un pesimismo muy complejo que le hace odiar y amar cosas al mismo tiempo. Pero esto no debe llevarnos a pensar que estamos ante los escritos de un loco que desvaría, sino más bien de un genio que nunca pretendió dar respuestas a nada, sino precisamente hacer cuestiones de todo. Para él lo importante no está en dar soluciones (nadie puede darlas realmente) sino en hacer que sus dudas sean interrogantes para nosotros también.Según se mire, la obra de Cioran no tiene porque ser pesimista, lo que verdaderamente es, es violenta. Las hojas que escribe están llenas de fuerza, de pasión, para activar a sus lectores, para en definitiva “hacer despertar”. Sus libros son como látigos que no evocan imágenes de pesimismo, sino que es la violencia de su fuerza la que nos hace darnos cuenta de que realmente estamos vivos.